No sólo los juguetes tenían atractivo cuando uno era niño, lo otro que más atraía la atención eran los catálogos, porque hacían correr aún más nuestra imaginación pensando que es lo que nos gustaría tener de lo que salía en ellos (que generalmente era todo), era la única forma que había entonces de ver y saber que otros juguetes de alguna serie ya habían salido o estaban por ser una nueva adquisición en nuestras listas navideñas (o cumpleañeras).
Creo no ser el único nostálgico al que estos catálogos le traen más de un recuerdo.
Los catálogos de juguetes fueron creados por las empresas con el fin de promocionar sus nuevos productos y los antiguos que aún seguían en stock y la mejor forma de hacerlo era dirijiendolos directamente a los consumidores, incluyéndolos dentro del empaque de las figuras, vehículos, playsets, etc.
Los primeros en hacer esto fueron para variar los japoneses. Takara ha sido la empresa visionaria en el mundo de los juguetes y sin ella probablemente no habrían existido los juguetes con los que jugamos cuando fuimos niños ni tampoco los que coleccionamos ahora. Es cierto que Hasbro y Mattel hicieron mucho por su lado, pero fue Takara la que hizo que estas empresas se esforzaran más en hacer un buen producto, sino aún seguiríamos con figuras de 8" semi-deformes y con nulo parecido (del rostro) al personaje que representan, o habríamos jugado con figuras de 12" sin vehículos o playsets.
Catálogo Takara Diaclone |
Takara se dió cuenta que sus ventas en japón podían ser mejores por lo que crearon insertos con fotos de sus productos incluidos en cada uno de ellos y se dieron cuenta de que las ventas crecieron, por lo decidieron hacerlos más grandes, con más fotos y con descripciones de sus productos con la intención de entusiasmar a sus consumidores, en otras palabras creaban lo que actualmente se conoce como Hype.
En occidente se dieron cuenta de la excelente estrategia de venta que crearon los japoneses, por lo que decidieron hacer eso en todos los juguetes que salían al mercado. Incluso las figuras que venían en cartón tenían un catálogo, era simplemente el reverso de este.
Esta práctica se perdió con la aparición de internet, por lo que los catálogos ya no eran necesarios, toda la información que se necesitaba para saber cuales eran las figuras que estaban a la venta o estaban prontas a salir ya estaban online.
Actualmente aquellos catálogos son tan coleccionables o buscado por coleccionistas como lo son los mismos juguetes. Algunos son bien valorados porque muchos cuando niños no sólo miraban el catálogo una y otra vez, sino que además rayaban los catálogos con marcadores con el fin de mostrarle a sus padres que figuras querían proximamente o para tener un registro de cuales figuras ya tenían, por lo que conseguir algunos catálogos en perfecto estado no es fácil, además de que algunos no fueron fabricados en el mejor papel y el deterioro es considerable sobre todo aquellos que eran plegables.
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Es verdad lo de la nostalgia, en las tiendas ya me conocian y me regalaban los catalogos de los vehiculos de gijoe en exhibicion xD
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